TIJUANA, BAJA CALIFORNIA.- En el corazón de una ciudad que vibra con cada golpe y celebra a sus guerreros con pasión, este sábado 24 de mayo, el ring del Grand Hotel Tijuana será testigo del regreso de un hombre que no ha perdido la fe: Rocco Santomauro.
Nacido en Duarte, California, pero con el alma tatuada en Tijuana, Santomauro no solo regresa al cuadrilátero, regresa a la ciudad que lo ha visto crecer, pelear y soñar. Con un récord profesional de 22 victorias —6 de ellas por la vía del nocaut— y apenas 3 derrotas, el púgil de sangre italoamericana carga en sus puños 134 rounds de experiencia y un corazón indomable que no conoce la rendición.
Su última aparición en el ring fue el 16 de diciembre de 2023, una noche amarga en la que cayó por decisión unánime ante Galal Yafai en disputa por el campeonato Internacional del Consejo Mundial de Boxeo en peso mosca. Aquella derrota caló hondo, pero no quebró su espíritu.
Hoy, con más madurez y sed de redención, Rocco se enfrentará a Sergio Orozco, oriundo de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, en una pelea pactada a seis rounds en peso mosca. Orozco es joven, hambriento y llega con la intención de hacer ruido, pero Santomauro pelea por algo más que un triunfo: pelea por la confianza, por la pasión, por volver a sentirse vivo en el lugar donde se forjan las leyendas.
Este sábado no solo se trata de estadísticas o títulos. Se trata del corazón de un boxeador que quiere volver a levantarse, que no olvida lo que significa subir al ring y dejarlo todo. Tijuana lo espera con los brazos abiertos. Porque en esta ciudad, a los valientes siempre se les da una segunda oportunidad.
Y Rocco Santomauro está listo para aprovecharla.